Acerca de Telarañas...

Sin la ayuda de blogeros consumados,
sin alardes de saber que hay entre manos,
sin enlaces musicales y sin videos,
sólo letras, verso y prosa depravados.

Sin fotos de vacaciones recientes,
sin tutear a los desconocidos,
sin chaquetas de cuero, rebecas de lino,
sólo tertulianos, locos inconscientes.

Sin incidir mucho en lo profesional,
sin contar penurias de lo acontecido,
sin rezar cual monja, lo que no he vivido,
sólo presunciones, nada personal.

Sin entrar al trapo de los que critican
sin otra intención que la de humillar,
sin contar visitas hasta hacer millar,
sólo diversión, no escribir por publicar.


viernes, 5 de febrero de 2010

Donde dije digo, igual digo Diego.

Descomposición.

Inspiraciones desinspiradas que se acobardan
desesperadas, en lucha interna por explotar,
en alocado juego de azar en el que jactarse
de no pensar para componer, para avanzar.

Extrañas frases que desunidas
hacen unión en  que basar los deseos,
alimentando lascivas formas de continuar
con los escarceos en la poesía.

Composiciones que en cuánto a métrica
dejan bastante que desear,
hacen del verso un arte vulgar
que pisoteas sin vacilar, para que pueda rimar.

La dotas de un sinsentido que haga sentir
al que lo trata leer, al que trata comprender,
que el qué no sabe escribir quizás esconde un poder,
aunque sea el de hacer el ridículo más vil.

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Repetir no es redundar, que es reiterar.

Reitero que lo que pienso, es redundar en lo que repito, y si repito lo que redundo y redundo en lo que pienso, reitero lo que no digo.