Acerca de Telarañas...

Sin la ayuda de blogeros consumados,
sin alardes de saber que hay entre manos,
sin enlaces musicales y sin videos,
sólo letras, verso y prosa depravados.

Sin fotos de vacaciones recientes,
sin tutear a los desconocidos,
sin chaquetas de cuero, rebecas de lino,
sólo tertulianos, locos inconscientes.

Sin incidir mucho en lo profesional,
sin contar penurias de lo acontecido,
sin rezar cual monja, lo que no he vivido,
sólo presunciones, nada personal.

Sin entrar al trapo de los que critican
sin otra intención que la de humillar,
sin contar visitas hasta hacer millar,
sólo diversión, no escribir por publicar.


viernes, 30 de noviembre de 2007

Para que el país sea un puño apretado gritando por La Argentina...

Es parte de la locución de Hugo Morales, en el partido de Maradona y 10 más contra Inglaterra, allá por el año 86. Hoy, tras 21 años de aquella locución, y recién regresado de mis vacaciones por La Argentina, entiendo ese comentario un poco más. Un país, Argentina, con unos recursos naturales tremendos, con un potencial turístico espectacular, con una población que no es muy elevada, tiene 35.000.000 de habitantes, de los cuales, 14 millones viven en la capital, Buenos Aires, veo que lo único que une a esa gente es el fútbol, y más concretamente la Selección. Cuando la albiceleste sale a la cancha, los barras bravas de la 12 (Boca) y los borrachitos del 14 (River), se funden en una sola persona, en un argentino y pueden abrazarse de la misma manera que cuando juegan esos dos clubes entre si, pueden matarse. Hoy, con esta introducción, empiezo el diario de lo que ha sido el recorrido por el país más maravilloso de los que he visitado.

Repetir no es redundar, que es reiterar.

Reitero que lo que pienso, es redundar en lo que repito, y si repito lo que redundo y redundo en lo que pienso, reitero lo que no digo.